El Puerto...

No podía dejar el blog cerrado y huérfano, ¡no!.
Los escasos dias que reposto en la capital, para seguir mi viaje al norte, quiero dejaros las estampas del Sur.
De la finisima arena y la luz.

Mis pasos se hunden, esta vez en una tamizada alfombra canela: suaves arenas gaditanas bañadas por la luz irreal del ocaso del día.

Durante la mañana, la luz me convierte en fotofóbica..demasiado intensa, pero al caer la tarde adormece su ira deslumbrante en un halo aureo que humedece el alma con la brisa marina.

El Puerto de Santa Maria guarda tipismo añojo combinado con las elegantes urbanizaciones construidas para disfrute de veraneantes de alto nivel, sobre todo procedentes de Sevilla.
Es lo que yo definí, en mi observación como "arquitecturas de colores".

Edificios que huelen a nuevo rodeados de una exuberante flora, digna de cualquier jardin botánico.

Nuevos espacios cuidados al detalle , contrastan fuertemente con algunas olvidadas barriadas humildes del pueblo.
Poco dá el mar a sus gentes..quizá alguna barca encallada, roida por el abandono.
Las omnipotentes bodegas Osborne o Therry, visita obligada de extranjeros en excursiones guiadas entre cubas de brandy.(y a las que confieso, no he visitado por falta de ¿motivación?).

En la misma linea, su impresionante plaza de Toros, flanqueada por una realista escultura de Rafael de Paula (Al menos eso me dijeron unos vecinos del lugar..aunque tuve la duda de que se tratara de Paquirri si alguien lo quiere aclarar aqui tiene su espacio).
En ella, uno se puede hacer a la idea del tamaño real de un toro de lidia, sin sufrir el peligro de recibir una cornada.

A destacar La Fundación Rafael Alberti, (deuda pendiente, que no puede visitar)

Y un acogedor y familiar Museo Arqueológico Municipal abierto generosamente a los escasos visitantes.
Es una pena, pues tiene piezas muy valiosas de las que me sorprendieron en especial los hallazgos de la Torre de Doña Blanca del siglo IV a.Xto. con muchas piezas cerámicas y el impresionante cuerno de Mamut o mandíbula de Mastodonte.
Poco conocido este tesoro arqueológico que es además gratuito, y con total libertad para pasear por sus tres salitas contadas..(yo hasta me atrevo a decir que "demasiada libertad"..por seguridad de tan valiosas piezas..)

Museo Arqueológico del Puerto

Peor suerte tiene su Iglesia Mayor Prioral, levantada en el siglo XV y tras numerosas recostruciones, su estado es bastante lamentable.
Cada año, compruebo con tristeza, el abandono y deterioro de sus tallas, sus retablos y hasta de su impresionante fachada con la Virgen de los Milagros.
Ojalá algun dia, alguien, se ocupe de un patrimonio tan hermoso y tan poco valorado.

¿Quereís mas curiosidades..?
Tras un paseo fructifero (y que cada uno elija sus preferencias): una cena en el Romerijo, Marisco y fritura como en ningun punto de la costa gaditana.
El broche perfecto.

La próxima estampa: atardeceres en la playa y solitarias puestas de sol.

Todavia queda mucho Sur.