A lo largo de la historia del arte, hemos visto reflejada en las obras, la representación de la muerte de muy distintas formas.
Si para unos era un ritual para el cual se preparaban durante toda la vida: como en el Egipto faraónico, para otros era el tormento espantoso de calaveras y piras ardientes, como nos mostró el mas febril barroco.
Por eso he querido acercaros a otra visión mas amable y menos traumática: la que nos ofrece el periodo denominado "Neoclásico".
En él, este trance seguro..(porque es de los acontecimientos que mas asegurados tenemos al 100 % que nos van a ocurrir), este trance, reitero, es tomado como momento de descanso y suma paz, una liberación del trasiego continuo de la vida y una exaltación de la muerte heroica.
Uno de los ejemplos que podemos tomar al azar, para ver como cambia la concepción de la muerte del Barroco al Neoclasicismo es el tema muy tratado en los siglo XVI y XVII de "El rapto de Lucrecia",cuyo argumento ya vimos en el post de Tintoretto.
Si el Barroco centra el asunto confiriéndole un marcado carácter sexual, es decir en el acto de la violación, como ocurre en el mismo Tintoretto, Tiziano.o Mariano Fortuny(dentro del eclecticismo español), el Neoclasicismo nos muestra la muerte de Lucrecia como una gran heroína, recien muerta con la palidez instalada en su carne, parece serena ante la comitiva de familiares que pretenden vengar su suicidio provocado por la deshonra de la violación.
Asi lo vemos en este cuadro de Gavin Hamilton "Bruto jura vengar la muerte de Lucrecia"
Es muy común esta exaltación del difunto como héroe, en contraposición con los personajes de alrededor del difunto, que parecen mas agitados y dolidos.
Este constraste pretende hacernos ver, que la felicidad está en él que se va, porque abandona el sufrimiento, y el dolor queda para los que sufren su ausencia.
Lo vemos también en estos dos ejemplos:
La muerte de Wolfe de Benjamin West,es "la muerte con honores" de el héroe de Quebec, que accede a la inmortalidad ante el reconocimiento de los que le rodean y admiran.
Del mismo estilo es su cuadro sobre la muerte del General Nelson.
O el duelo de Andrómaca ,esposa desconsolada, y su hijo angustiado, ante el cadáver de Hector, que antagoniza con la tranquilidad del héroe muerto (del pintor Jacques-Louis David.)
Esta idea de serenidad y belleza de la muerte, rompe con el tenebrismo del Barroco que nos tenia acostumbrados a espectros de calaveras y mortajas.
La idea de un bello cadáver agradó tanto a cristianos como a escépticos.
Su representación artística pudo inspirarse en la leyenda de Endimión, el mas bello jovén de los mortales, condenado al sueño eterno por la diosa Lunar Selene.
Nace así, el concepto de presentar la muerte como hermano del sueño, dulce sueño eterno.
Y su muestra mas clara la encontramos en el monumento a Clemente XIII en San Pedro.
En ella Antonio Canova nos regala al genio de la muerte, no como el cancerbero ni el verdugo, sino como un hermoso joven, paralelo al sueño..como su hermano gemelo.
Podéis verlo en la imagen que encabeza el post.
Quizá en ella se inspiró el Endimión de A.L.Girodet,anticipo del sueño de la muerte.
Hemos visto la muerte heroica, y la hermosa muerte del sueño.
Para finalizar por este pequeño recorrido de la muerte Neoclásica dejo este magnífico cuadro que resume la muerte en soledad con toda su serenidad y categoria.: La muerte de Marat de J.L.David. símbolo de la inmortalidad de la Ilustración.
Muerte sin comparsa ni testigos con los elementos que quiso destacar el autor: Su pluma y su carta y el silencio, compañero último, representado por un difuminado fondo mudo.
Para saber mas: el libro "NEOCLASICISMO" (Capítulo 5º:La sensibilidad y lo sublime.2.El modo neoclásico de la muerte.) de Hugh Honour.
Interesantísimo este trabajo obre la muerte vista a través del arte del Neoclasicismo. La muerte, ese trance que nos toca pasar a todos, antes o después, esa etapa de nuestra "vida" que comenzamos a vivir desde el momento mismo del nacimiento, aunque algunas filosofías o creencias, sobre todo entre las pertenecientes a la llamada Nueva Era, afirman que no necesariamente tenemos que pasar por ahí, como nos cuenta la famosa astróloga Linda Goodman en su libro Los Signos del Zodiaco y las Estrellas.
ResponderEliminarEn la comparación tan acertada que haces de la pintura barroca respecto de la neoclasica en relación al tema de la muerte, se podría hacer referencia a tu post de hoy ¿Angeles o Demonios?...Todo depende del punto de vista o del humor con que se haya uno levantado. Está claro que el colmo del optimismo vendría representado por el pensamiento de Linda Goodman que, traspasado a la canción de Urquijo y de Fito, sería algo así como no creerse que su pareja le ha dejado y continuar como si todo siguiera igual y esperar a que vuelva como si nada hubiera pasado.
Muchas gracias por todo este extenso comentario solariana..y enlazando con el final es cierto que en la medida debe estar el acierto, a veces nos sentimos en el peor de los pozos y otras en el mejor de los paraisos, pero quizá también va en la estabilidad de cada persona.
ResponderEliminar..es cierto que el optimismo de algunas personas, ademas de rallar en la ingenuidad, a veces asusta.
un abrazo.