Echó el cerrojo.
pero no fue bastante aquel encierro.
aquella soledad casi esperada.
El aire tornó denso.
un miedo a errar cubrió todo el espacio
cortando la ilusión desesperada.
Se abrió el cerrojo
tambien la puerta pués la ocasión perdida:
solo llama una vez apasionada.
Aprendiz de primavera.
aquella soledad casi esperada.
El aire tornó denso.
un miedo a errar cubrió todo el espacio
cortando la ilusión desesperada.
Se abrió el cerrojo
tambien la puerta pués la ocasión perdida:
solo llama una vez apasionada.
Aprendiz de primavera.
Foto:cynthia greig
Genial el texto y sobre todo la foto, tiene mucha fuerza: ese dedo "gigante", grasiento, uña esmaltada... ¡PRECIOSA FOTO!
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