En lo gris de lo cotidiano, en la monotonia de la cadena rutinaria de los dias, surje la esperanza del recuerdo.
El recuerdo de la ilusión, de la niñez, de todo lo que ansiamos y llevamos dentro cuidadosamente guardado.
Cuando perdemos esa capacidad de soñar, cuando materializamos o racionalizamos nuestos mas intimos anhelos, puede que lleguemos a sentirnos como el protagonista de More, ya un corto clásico en la historia de la animación de Mark Osborne.
Cuidad de vuestros recuerdos y deseos.
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