Amado mío,
te quiero tanto,
no sabes cuánto,
ni lo sabrás.
Si te consigo,
amado mío,
siempre conmigo
te quedarás.
Todo lo que tengo,
amado mío,
a tus pies está...
Para tí será,
para tí lo guardé.
Todo lo que tengo,
amado mío,
desde que te ví
no me sirve a mí,
y sé bien el por qué.
En tu mirada
a veces veo
un buen deseo
y nada más.
Amado mío,
te quiero tanto,
no sabes cuánto,
ni lo sabrás...
"Si fuera un rancho me llamarían tierra de nadie".
te quiero tanto,
no sabes cuánto,
ni lo sabrás.
Si te consigo,
amado mío,
siempre conmigo
te quedarás.
Todo lo que tengo,
amado mío,
a tus pies está...
Para tí será,
para tí lo guardé.
Todo lo que tengo,
amado mío,
desde que te ví
no me sirve a mí,
y sé bien el por qué.
En tu mirada
a veces veo
un buen deseo
y nada más.
Amado mío,
te quiero tanto,
no sabes cuánto,
ni lo sabrás...
"Si fuera un rancho me llamarían tierra de nadie".
Me encanta tu blog repleto de sensibilidad. He empleado varios días en leerlo y me lo he pasado en grande, especialmente porque muchos de los sentimientos que se describen ahí me resultan conocidos.
ResponderEliminarUn besazo desde Cádiz. Sigue deleitándonos. Salud y República.
Emilio
http://www.youtube.com/watch?v=WQpRdLkUcB8
ResponderEliminarRICK: Siempre nos quedará París. No lo teníamos. Lo habíamos perdido hasta que viniste a Casablanca; pero lo recuperamos anoche.
ResponderEliminarSimplemente una Musa
ResponderEliminarSi Blonde..una musa..cuya vida real fue muy desgraciada..
ResponderEliminarUna musa de guante negro.