"En todas las parejas que investigan la felicidad amorosa hay un reparto de funciones que no depende del sexo respectivo.Al principio, por ejemplo,(pero las variables son infinitas), ella es buena, docíl, no sabe ganar dinero, es lista , frágil, cariñosa y fiel,en tanto que él es cólerico,independiente,eficaz, inteligente, protector e infiel.Es un esquema vulgar, pero frecuente. Pués bien, sea cual sea el reparto de funciones, a lo largo de una investigación amorosa TODAS LAS FUNCIONES SE TRUECAN, si es que estamos hablando de una investigación seria, porque se trata de un fenómeno mutuo de espejismo y cada uno de los Objetos quiere ser el Otro.
Y lo consiguen.Conseguirlo quiere decir dos cosas;primero, aburrise del Otro por lo mucho que se parece a lo que Uno era ANTES, segundo, comprender lo mediocre y zafio que era uno ENTONCES.
Consecuencia: el otro es AHORA mediocre y zafio."
Felix de Azua.Historia de un idiota contada por él mismo o El contenido de la felicidad.
http://www.youtube.com/watch?v=1lmk01Nb7vE
ResponderEliminarTodos somos al mismo tiempo Todo y todos. Yo y el/la otro/a. ¿Y cuándo nos gustamos menos aún que la persona que parecía no gustarnos? Ocurre, igual que sucede al contrario ¿No hay mañanas en las que uno vive complacido y feliz, enamorado de sí mismo? La vida no es mucho más que la barraca de los espejos de cualquier feria. Es así de humilde y de entretenida, igual de sorprendente, y a veces también, como la imagen que nos devuelve el espejo, injusta. ¿Somos el espejo en el que se ven los demás? ¿Les devolvemos la imagen que merecen?
ResponderEliminarEn la particular filosofia del amor..todo puede reducirse a un binomio:
ResponderEliminarAdmiración y deseo.
Si solo hay admiración la relación es un sentimiento plátonico e intelectual.
Si solo hay deseo la relación es un intercambio de necesidades sexuales que pueden ser o no abastecidas con éxito por ambas partes.
En el equilibrio esta el triunfo, algo tan simple como amar en cuerpo y alma, tan simple y tan difícil de conseguir.
De todos modos, has elegido a conciencia las dos palabras que titulan tu entrada. No sé si puede haber dos conceptos que enamoren menos: medocre y zafio. Y gracias, porque a la frase hecha del "amar en cuerpo y alma" nunca le había colocado más atributos, el deseo, la necesidad física del cuerpo (el cuerpo del delito) y el alma, la mente que alimenta entre otras cosas sensibilidad e imaginación, dos herramientas muy útiles para estas cosas del corazón cuando anda a medias con el cuerpo.
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