Debió intuirlo…
Debió creerlo…
Ya lo sabía: que estaba sola como un perro.
Ya lo sentía: muda en silencio.
Debió pensarlo
Debió preveerlo
Y no veía, que solo era un pasatiempo
No lo creía, durmió en lo lento.
Volvió el engaño
Volvió el lamento
¿Como creía ser para alguien algo bueno?
Siempre su vida fue puro invento.
Cayó en lo triste.
Cayó en lo negro.
Un ave ciega que se destroza en pleno vuelo
Debió creerlo…
Ya lo sabía: que estaba sola como un perro.
Ya lo sentía: muda en silencio.
Debió pensarlo
Debió preveerlo
Y no veía, que solo era un pasatiempo
No lo creía, durmió en lo lento.
Volvió el engaño
Volvió el lamento
¿Como creía ser para alguien algo bueno?
Siempre su vida fue puro invento.
Cayó en lo triste.
Cayó en lo negro.
Un ave ciega que se destroza en pleno vuelo
Una hoja seca, una esperanza en otro cielo
Aprendiz de primavera.
Foto: shampoo
Para mí, el mejor poema de los tuyos que has publicado en el blog.
ResponderEliminarEres estupenda.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias a los dos, por esta
ResponderEliminardosis-extra de Suavizante...