El montañista neozelandés Sir Edmund Hillary, el primer hombre que puso los pies en la cumbre más alta del mundo, el Everest (8.848 metros), en la cadena del Himalaya, murió ayer, en su país, a la edad de 88 años.
Está ha sido sin duda su última gran expedición.
Una perdida.
ResponderEliminarLa hazaña y afán de superación de personas como él y como otros muchos que han ampliado los límites de la realidad luchando contra los elementos, me merecen un gran respeto, porque es claro que la lucha es totalmente desigual. Eso es lo que les hace "superiores".
Descanse en paz.
Salud.
Seguro que descansa en paz pato, subir al cielo no es para el ninguna novedad.
ResponderEliminarYa ha estado muchas veces cerca de él.
Un abrazo.
A algunos nos hizo, con su compañero Tsenzing, vivir una aventura inolvidable. Los libros sobre los conquistadores como éstos los guardo como oro en paño.
ResponderEliminarexcelente blog, es una pasada
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